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Tres nuevas propuestas para este sábado en nuestra Jornada:

TRIBUNO

(2005), de Karl-Heinz Schmiel

Juego de tipo FAMILIAR, para 2-5 jugadores

que dura unos 60 minutos y está en castellano

Un juego de colocación de trabajadores para comprar cartas, con subastas y enfrentamientos entre familias de tribunos que intentan controlar (incluso “robándo” a otros jugadores...) diversas facciones: gladiadores, legados, pretorianos, plebeyos, patricios, vestales y senadores.

Un juego nada inocente...

 

21 MUTINES

(2011), de Perepau Llistosella

Juego de piratas de tipo  FAMILIAR, para 3-5 jugadores

que dura unos 45 minutos y está en castellano

El Santa Marta es un barco pirata pero éstos son feroces y tienden al descontrol y a amotinarse más de la cuenta…

El capitán decide lo que se va a hacer en cada turno:

- Abordar barcos en rutas comerciales para robar joyas

- Abordar barcos en rutas no comerciales también para robar joyas

- Rebuscar entre los restos de diversos naufragios para apoderarse de tesoros

- Ir al mercado negro para cambiar joyas por doblones o ron

- Ir a la ciudad para obtener diversos objetivos algunos inconfesables…

- Ir a la taberna para conseguir ron

Los piratas pueden decidir seguir a su capitán y hacer la misma acción, pero en el Santa Marta hay un gran espíritu de contradicción y algunos piratas pueden desobedecer al capitán optando por otras opciones:

- Ir al camarote para obtener puntos de prestigio o, incluso robándolos a otros piratas, algún que otro doblón perdido…

- Decidir amotinarse para substituir al capitán a partir del próximo turno.

El juego dura exactamente 21 motines, de ahí su nombre.

Un juego sencillo, divertido y con más sorpresas de las que cabe imaginar.

PROHIS

(2014), de Marc Brunnenkant

Juego de cartas con bluff (engaño) de tipo  FAMILIAR, para 2-6 jugadores

que dura entre 20 y 30 minutos y es independiente del idioma

Es un juego sencillo de bluff o engaño. Un juego breve pero que genera muchas risas. Se explica con rapidez y se juega en unos 25 minutos.

Contrabando en la época de la Ley Seca. Hay cartas de mercancía “correcta”, de mercancía de contrabando y de policías. Los jugadores pueden montar convoyes de hasta 4 cartas que pueden (o no…) ser inspeccionados por los otros jugadores si creen que puede haber contrabando. Aunque si no lo hay o, peor, si hay un policia infiltrado en el convoy, las cosas irán mal para el investigador…¿Quién se arriesga?